Baía do Sancho, Brasil: el paraíso escondido irresistible

Si alguna vez soñaste con una playa perfecta —aguas turquesas, acantilados cubiertos de vegetación y un entorno natural casi intacto—, Baía do Sancho, en el archipiélago de Fernando de Noronha (Brasil), cumple con ese sueño.

Baía do Sancho, Brasil

Elegida en múltiples ocasiones como la playa más bonita del mundo, es un destino que combina naturaleza virgen, vida marina espectacular y una sensación de desconexión total. Hoy día Praia do Sancho está considerada como la más linda de Brasil.

Baía do Sancho se encuentra en el Parque Nacional Marino de Fernando de Noronha, a unos 350 km de la costa noreste de Brasil, frente a Natal y Recife. Solo se puede acceder en avión desde estas ciudades hasta la isla principal, y desde allí, seguir por tierra hasta un mirador desde donde bajas por unas escaleras empotradas en el acantilado.

El acceso limitado contribuye a mantener su estado prístino y su ambiente tranquilo: Aquí no hay señal, no encontraras chiringuitos ni al que te pone los parlantes a todo volumen en la playa. Solo el sonido del mar y los pájaros.

A diferencia de las playas urbanas, Baía do Sancho ofrece una experiencia completamente natural. Es una playa salvaje de Brasil, completamente agreste. No hay servicios directos sobre la arena, pero sí encontraras instalaciones básicas en el mirador: baños, zona de descanso y un pequeño punto de venta de bebidas.

👉 Consejo viajero: lleva agua, protector solar biodegradable y algo para comer. El acceso es parte de la aventura, y una vez abajo, no querrás subir enseguida.

Aislada, de arena fina y dorada que parece polvo, bañada por un agua verde esmeralda tan clara como el cristal, peces tropicales entre corales y rodeada de vegetación y fauna intocables, las actividades en Baia do Sancho son al aire libre. Para disfrutarlo, vivir la experiencia de lo natural.

El buceo y snorkel en baia do Sancho son de clase mundial. Sancho es parte de un parque marino protegido. En sus aguas cristalinas nadarás con delfines giradores, tiburones de arrecife, rayas y tortugas marinas.

Los mejores puntos para sumergirse están cerca de las piedras y frente de la playa, nadando un poco mar adentro donde hay unas rocas con bastantes peces alrededor. Además hay una cueva marina muy interesante en esa zona.

Desde el Puerto de Noronha podrás participar en excursiones organizadas con equipos y guía local, reservando anticipadamente aquí.

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Baia Do Sancho es el lugar ideal para los amantes del trekking. El sendero que conecta con la vecina Baía dos Porcos regala vistas inolvidables del famoso Morro Dois Irmãos, uno de los iconos naturales de Brasil. Es un recorrido fácil, ideal para quienes quieren combinar playa y caminata.

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El alojamiento en la isla es limitado, pero hay posadas ecológicas, bungalows y pequeños hoteles boutique.

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Una opción económica y céntrica.

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La praia de Sancho está ubicada en la costa norte de la isla, a aproximadamente 2 kilómetros al oeste del aeropuerto de Fernando de Noronha.

Puedes volar desde Recife o Natal hasta Fernando de Noronha Airport (FEN). Desde allí, taxis ecológicos o minibuses locales os llevan al parque. Recuerda que para ingresar se debe pagar una tasa ambiental que ayuda a conservar este patrimonio natural. Al llegar hay una escalera que baja a la playa de Sancho, es bastante empinada y no está en las mejores condiciones.

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Las temperaturas son agradables durante todo el año, pero en mayo y junio, además podrás ver dos cascadas cayendo por las paredes de la playa. Durante agosto y noviembre es ideal para bucear, nadar y días de playa relajados. Es cuando el mar está más calmado y la visibilidad es excelente.

Esta bahía de Brasil es una de las últimas playas verdaderamente vírgenes del planeta. Su acceso restringido preserva un entorno casi sagrado donde la naturaleza manda. Además de las increíbles vistas y paisajes, los imponentes acantilados verdes te dejarán sin aliento. Este paraíso brasileño es ideal si buscas desconectar del mundo, recargar energía y sentir la magia del Atlántico Sur.

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